Actualmente podemos encontrar varias terapias contra las varices. Por ejemplo la cirugía, llamada también fleboextracción o varicectomía venosa.
Aunque poco a poco estamos evitando esta cirugía con nuestros tratamientos, tenemos que tener en cuenta que hasta hace poco era uno de los tratamientos más usados.
El problema de la operación es que pese a que se intentan quitar el mayor número de varices posibles, la idea es siempre preservar la vena afectada, que suele ser la vena safena, la más larga del organismo.
Estas incisiones y extirpación de varices es un proceso largo para el que se necesita anestesia general y por ello el proceso de recuperación es aún mayor.
El grave problema es que la eliminación de estas arañas varicosas no impide que salgan otras nuevas, y suele ser muy frustrante para el paciente.
Además suele dejar bastantes cicatrices.
No lo dudes, y prueba nuestro tratamiento que no es nada agresivo y no genera ningún problema posterior.
