Una fisura anal es un desgarro en el conducto anal que, debido a la situación donde está, puede infectarse fácilmente. Si te encuentras con este problema, una rápida actuación puede ayudarte a evitar males mayores. Pero, ¿qué hacer si la sufres?
- Fisura anal: lo que debes hacer en el momento en que ocurre
Las fisuras anales pueden ser bastante frecuentes. Si notas que tienes periodos de estreñimiento, te cuesta ir al baño y, cuando lo haces, las heces tienen sangre, o al limpiarte la detectas, puede ser que te hayas hecho una fisura.
Además, esta llega a ser dolorosa si no se trata. Por eso, cuando se produce, actuar sobre ella ayuda a solucionar el problema. ¿Y qué hacer?
- Empieza cambiando tu dieta. Una buena alimentación rica en fibra ayudará a que las heces sean más blandas y que tu cuerpo se regule mejor, con lo que, a la hora de pasar por el canal anal «dolorido», vas a conseguir que haya un mayor alivio porque no se producirán frotamientos, nuevos desgarros, etc. y así curará en un plazo de 4 a 6 semanas.
- Toma líquidos. Los líquidos ayudarán a una hidratación mayor y también a tu digestión. Pero sobre todo influirán en la materia fecal, haciendo que las paredes anales no se dañen.
- Cremas anestésicas. O remedios caseros que ayudan a aliviar las molestias y a cicatrizar mejor la zona.
Eso sí, en caso de que el sangrado persista o las molestias vayan a más será necesario acudir a tu médico.