Las varices no solo son una molestia estética, también te producen problemas en las piernas: las sientes más cansadas, te pican, hay quemazón… Es algo habitual que te ocurre al finalizar el día. Sin embargo, hay formas de evitar las varices.
Te dejamos algunos consejos para que las varices no formen parte de tu cuerpo (o al menos retrasarlas lo más posible y que no hagan que tu vida cambie en torno a ellas).
1. Intenta levantarte de la cama y darte una ducha en las piernas. El cambio de temperatura, los chorros de agua fría y caliente (terminando siempre con fría) ayuda a dar elasticidad en las venas y te alivia las molestias. Por la noche también puedes hacerlo.
2. No cruces las piernas. Es una postura habitual de las mujeres pero que causa mucho daño a tu cuerpo. Con ella lo que haces es comprimir las venas, impidiendo que el flujo sanguíneo corra normal.
3. Dile adiós a los tacones altos. Los expertos recomiendan que los tacones no sean mayores de 2-3 centímetros para que el peso de tu cuerpo no recaiga solo en los tobillos. No solo conseguirás que las varices no salgan, sino que tu cuerpo no se resienta con los años.
4. Buena alimentación. Sí, la alimentación adecuada puede conseguir que las varices no aparezcan. Sobre todo los alimentos ricos en flavonoides. Por ejemplo, los arándanos, que son una fuente importante de estos. Ten en cuenta que si ya tienes varices, hay tratamientos para eliminarlas.
