Tener una fisura anal e ir al baño es un auténtico suplicio. No solo por el dolor que vas a sentir, sino porque sabes que la herida tardará más tiempo si no eres regular. Por eso, tampoco es bueno estar estreñido, ni tener diarrea, porque sería un infierno.
Sin embargo, hay algunos trucos que puedes aplicar para ir al baño con una fisura anal y que no sea tan doloroso como imaginas. ¿Te echamos una mano con ello?
Ir al baño con una fisura anal: así no te dolerá
Cuando tienes una fisura anal lo que ocurre es que sientes un dolor muy intenso y punzante, que se agrava más cuando tienes que ir al baño y que te acompaña durante 2-4 horas cada vez que vas de vientre. Es como cuando te haces un corte con un folio que duele tanto, pues algo parecido.
Al estar en una zona interna, y que además se infecta muy fácilmente, es más complicada de cuidar y de curarse. Por eso, a la hora de ir al baño, ten en cuenta lo siguiente:
- Sigue una dieta que sea rica en fibra.
- Bebe mucha agua.
- Cuando vayas al baño, intenta tener un escalón, un asiento, un cubo… donde puedas subir las piernas de tal forma que te sea más fácil y rápido ir de vientre. Cuanto más rápido y menos esfuerzo hagas, menos va a doler la fisura.
- Intenta hacer baños de asiento con agua tibia.
- Aplica cremas cicatrizantes.
- Toma analgésicos.
Así podrás tener más posibilidad de que no te duela tanto y se cure antes.